domingo, 28 de septiembre de 2008

CREER Y DUDAR

Toda creencia es peligrosa. No debes creer, debes ver. Dudar es mejor que creer porque la duda no puede convertirse jamás en un obstáculo, la duda permanece abierta. Creer es cerrar la mente y así se cierra la apertura, así no puedes mirar.

De hecho una persona que cree, teme mirar, porque tal vez la verdad sea contraria a su creencia, así que mejor cierra los ojos.

Es más fácil proteger las propias creencias con los ojos cerrados que con los ojos abiertos. Quien sabe? Puede que la verdad no coincida con tus creencias, que la vedad destroce tus creencias, que la verdad esté contra tus creencias. Y que harás? Entonces es mejor estar con los ojos cerrados.

Una persona que alberga creencias se torna temerosa, no busca, no indaga, no investiga, nunca explora, se aferra a sus creencias de todo corazón a causa del miedo. La auténtica religión no proviene del miedo, no debería al menos.

Permanece abierto, explora, duda, piensa, medita, experimenta, y cuando una mente experimenta la verdad sin ninguna creencia, aparece la fe, la propia mente se convierte en verdad, porque entonces tiene lugar una comunión entre la verdad y la mente.

domingo, 21 de septiembre de 2008

CONOCIMIENTO, SABIDURIA Y FE

El conocimiento es lo que no se basa en tu propia experiencia, la sabiduría está basada en tu propia experiencia. Confía solo en lo que tú has experimentado, no confíes en nada más, lo que es tuyo es verdadero, lo que no es tuyo es falso. Una verdad solo es verdad si lo has experimentado, cuando tú no la has experimentado, incluso una verdad se vuelve una mentira. Desembarázate de las creencias, solo la sabiduría sirve de ayuda.

La creencia es solo fe en apariencia, en el fondo existe la duda porque no has experimentado. Sin conocer, la duda permanecerá en lo profundo de tu corazón, algún día deberas enfrentarte a ese hecho y el tiempo que desperdiciaste reprimiéndola no habrá servido de nada. Por lo tanto y en primer lugar, deberás enfrentarte a la duda, reconocerla.

La duda que se reconoce, que no se reprime, desaparece. Entonces surge la fe. Mediante la creencia confías en otros, pero lo otros no pueden ir contigo, por lo tanto no te apoyes en otros, apóyate en ti mismo, porque al final de la etapa te quedarás solo, y solamente tus propios ojos, tu propia sabiduría te serán de ayuda. Ni las viejas respuestas, ni las respuestas de otros sirven, la vida es irrepetible, deberás hallar tu propia verdad. Depende unicamente de tu propia experiencia. Resuélvela en tu mente y despréndete de todo lo que no sea tuyo.

miércoles, 10 de septiembre de 2008

LA FELICIDAD

¿Porqué el ser humano lleva tanto tiempo siendo desdichado? Y el milagro es que todo el mundo quiere ser feliz, no obstante, es seguro que no se encuentra a algún ser humano que quiera ser desdichado, sin embargo, la mayoría de los seres humanos lo son.

Hay que enteder una cosa básica, el ser humano quiere la felicidad y por eso es desdichado, cuanto más felices quieren ser, mas desdichados terminan siendo. Parece absurdo, pero esa es la causa de fondo.

Si quieres salir de la desdicha, debes entonces también salir del deseo de ser feliz. Esto es lo que Freud no descubrió, no pudo entender que el mismo deseo de felicidad puede ser la causa de la desdicha.

En el momento en que anhelas la felicidad, te has alejado del presente, te has alejado de lo existencial y has pasado al futuro que no está en ninguna parte, que todavía no ha llegado. Has pasado a un sueño y los sueños son irreales. Y a través de lo irreal es muy difícil alcanzar lo real.

El deseo de felicidad, no hace más que demostrar que ahora mismo, en este preciso momento no eres feliz y te estás proyectando a un futuro, que algún momento, algún día, de alguna manera serás feliz. Tu proyección surge de la desdicha, lleva consigo la semilla de la miseria, sale de ti, no es distinta de tí.

Proyectas para mañana que serás feliz, pero mañana es una proyección tuya, de tu hoy, de lo que eres. Si eres infeliz, el mañana partirá de esa infelicidad y así serás todavía más desgraciado y entrarás en un círculo vicioso, cuanto más infeliz seas, más felicidad desearás y cuanto más desees la felicidad, más desdichado serás.

Lo primero que deberás hacer es no soñar, no proyectar. Lo primero es estar en el aquí y en el ahora, sea lo que sea…permanece en el aquí y ahora y entonces comprenderás una revelación tremenda: Que nadie puede ser infeliz en el aquí y ahora. Entonces la felicidad no solo es posible, sino que ya ha sucedido, ¡está delante de ti! Pero no la ves porque buscas por los lados. Muere al pasado y nunca pienses en el futuro.

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