miércoles, 23 de julio de 2008

LAS ENFERMEDADES

Paracelso solia decir: “Hasta que no conozcamos el estado de tu armonía interior, solo podremos, como mucho, aliviarte de la enfemedad, porque tu armonia interior es la fuente de tu salud…”

Ningun otro animal en la tierra es tan problemático como el hombre, casi siempre está tenso, ansioso, enfermo. Solo él tiene la capacidad de enloquecer, no ha podido ser feliz con lo que es, no ha podido aceptar lo que es y es la propia enfermedad la que provoca el dinamismo en el hombre y también su desdicha, porque siempre está inquieto, sufre y se angustia normalmente. El hombre es una enfermedad, porque no se satisface con nada.

Es conveniente comprender que la medicina, especialmente en occidente, analiza, por lo general, cada enfermedad por separado, supone que las enfermedades vienen y se van, sin embargo, la medicina moderna ha comenzado a comprender que no solamente hay que tratar a la enfermedad, sino principalmente al paciente; todo el trabajo de la medicina gira en torno a qué es la enfermedad, aún no a descubierto la dimensión de qué es la salud.

La enfermedad, es una forma de vida que vive el paciente, tiene su propia individualidad, su propia personalidad. El hombre es cuerpo-mente, pero también es alma, es decir, el hombre es un todo; esa parte del espíritu que está al alcance de los sentidos es el cuerpo y aquella parte del cuerpo que está más allá del alcance de los sentidos es el alma, y las enfermedades pueden comenzar por el cuerpo o por el alma, y aunque las enfermedades tengan su origen en el exterior, su vibraciones resuenan en el camino al alma o viceversa.

El hombre pobre no padece tanta ansiedad como el hombre acomodado, porque el hombre pobre al menos encuentra una justificación a sus problemas: que es pobre, pero el hombre próspero no tiene esta justificación, ni siquiera puede determinar el motivo de su ansiedad y entonces las dificultades son mayores, cada día crea nuevas ansiedades y todo lo que tiene, día a día se vuelve carente de sentido y hay una lucha continua por aquello que todavía no tiene.

Intenta atraer a tu vida cotidiana el silencio, la serenidad, la felicidad, la sensiblidad, compártelas, y talvez habrá en tu vida lágrimas de alegría, pero no habrá lágrimas de tristeza.

domingo, 20 de julio de 2008

QUÉ ES LA VIDA

El Maestro Sócrates decía: “Cuando yo era joven creía que sabía mucho, cuando envejecí y maduré en sabiduría, llegué a entender que no sé nada.”.
La vida es un misterio tal, que nadie ha podido entenderlo, es que tratar de entenderla simplemente es imposible, porque un misterio es insoluble por naturaleza y no hay forma de resolverlo. El buscar siempre lleva a lo que no es verdad, solo una mente que no busca se da cuenta de lo que es, porque siempre que uno busca se pierde lo que ES. El buscar es deseo, se lidia con el futuro, introduce el factor tiempo y se pierde este momento, se pierde este aquí y ahora, la verdad está aquí, la verdad está ahora, no en el pasado, no en el futuro, está en este presente, en este momento que te encuentras leyendo estas letras, este momento es la eternidad.

Varios Maestros dicen que no hay nada que buscar, porque no hay nada que pueda ser buscado. Quien pide el conocimiento no puede pedir el SER, el conocimieno es insignificante, el SER es vida, cuando dejes de pedir conocimiento habrás dejado de preguntar acerca de la verdad, pues la verdad es el objetivo del conocimiento. Cuando no preguntes qué es la vida, qué es el SER, sino más bien, cuando aprendas a quedarte en silencio, cuando logres el estado de vacío, de no-mente, aquello que ES, se te revelará, pues la verdad te rodea, existes en ella, del mismo modo que los peces existen en el océano, tú existes en la verdad.

Vuélvete inocente y puro como un niño ya que solo el corazón de un niño puede golpear a la puerta de lo divino. Recuerda: “A menos que te vuelvas como un niño, no entrarás en el reino de los cielos.”

El silencio es la puerta
La paz interna es la puerta
La no violencia es la puerta
El amor y la compasión son las puertas

miércoles, 16 de julio de 2008

LOS CELOS

Siempre que una persona se relaciona sexualmente, siente temor, porque el sexo en realidad no es una relación. Si estás vinculado sexualmente a un hombre o a una mujer, siempre temes que ese hombre se vaya con otra o que esa mujer se vaya con otro, es decir no hay lo que se llama relación, lo que existe es una mutua explotación. Se explotan uno a otro pero no se aman, y saben que es así, por eso tienen miedo y ese miedo se transforma en celos, y entonces tú no permites que las cosas ocurran, sino que las vigilas, se llegará, incluso a organizar ciertas cosas, desde el punto de vista de la seguridad, para que ese hombre no pueda mirar a otra mujer; cerrarás todos los senderos, todo acceso que ese hombre pueda tener hacia otra mujer o que esa mujer pueda tener hacia otro hombre.

Pero entonces surge el problema, cuando todas las puertas se cierran el hombre muere, la mujer muere, te vuelves prisionero, esclavo, y no se puede amar a un ser muerto o a quien no es libre, porque el amor es bello cuando se da libremente, cuando no es tomado, exigido o forzado, de otra manera, una esposa o un esposo se convierten en un objeto que hay que guardar, poseer, controlar, pero cuando más controlas, más lo matas, porque se ha perdido la libertad, y tal vez la otra persona siga allí pero no por amor, sino por otros motivos.

Si amas a una persona, el amor mismo será suficiente garantía, el amor mismo será suficiente seguridad, si amas a alguien, sabes que no se irá con otro(a). Y si se va, se va; nada puede hacerse. Si se va, es que nunca hubo amor y nada se puede hacer. El amor trae esta comprensión. No hay celos. De modo que, si hay celos, sabes bien que no hay amor. La confianza es algo que no debe ser mantenida; está o no está. No desperdicies tu energía en peleas, celos o conflictos, sigue tu camino y hazlo amigablemente, no trates de forzar la confianza, eso nunca ocurre. Confía o sigue tu camino.

sábado, 12 de julio de 2008

POR QUÉ SE SUFRE

Adolf Hitler sufria de hondas depresiones y fue a ver a su psicoanalista, el profesional le aconsejó que continuamente repita: "Soy importante, soy indispensable, soy significativo". Hitler contestó que el consejo era malo, porque le decía: soy tan mentiroso, que sea lo que digo no me lo creo.

Claro, si uno repite algo a partir de una mentira, todo lo que diga también será una mentira. Si una persona intenta amar a partir del odio, lo que logrará es que ese amor esté lleno de un odio oculto y si acude a los predicadores ellos le dirán: "tratad de amar...", pero cómo puede una persona llena de odio tratar de amar?. Ese es el conflicto, entonces, si tienes un problema no crees otro, quédate con el primero y resuélvelo, los problemas desaparecen cuando se los acepta y se vuelven más complejos si se crea un conflicto respecto a ellos, en este caso, de la comprensión del odio surgirá el amor.

El sufrimiento está ahi, es parte de la vida y del crecimiento, no tiene nada de malo. El sufrimiento se vuelve maligno sólo cuando uno sufre y nada surge del sufrimiento. La oscuridad es hermosa si de ella no tarda en surgir el alba, la oscuridad es peligrosa si es incesante y no lleva a amanecer alguno.

Escapas de un sufrimiento a otro, porque la mente que ha creado un sufrimiento creará otro. Acepta el sufrimiento y atraviésalo, no escapes, permite que ocurra; si quieres temblar, tiembla. Los que se dicen o se creen valientes, solo han creado una valentía que los rodea, pero esa valentía no es más que una fachada, porque en lo profundo son más cobardes que el que acepta el sufrimiento, pero actúan de tal modo que todos sepan que no son cobardes.

miércoles, 9 de julio de 2008

LA NECESIDAD DE TRANSFORMARNOS


Decía Sócrates: "Un maestro no es más que un partero". Y la verdad es asi, un Maestro puede ayudar, puede proteger, puede guiar, pero nada más. La transformación tiene que ocurrir a cada uno de nosotros, desde luego que habrá sufrimiento, simplemente porque no es posible volver a nacer sin sufrimiento, tal vez surja mucha angustia, porque nosotros mismos la hemos acumulado a través de los años. De la oscuridad del sufrimiento se alzará una nueva mañana, habrá un nuevo sol.

Este Blogg, extrae o resume varios de los temas publicados en los libros que han sido editados de las conferencias realizadas por Osho en el mundo, e intentará, que en cada uno de los interesados que el rio de su vida comience a fluir, descendiendo del estado mental egoista que ha estado paralizado por nuestro ego.

Hablaremos sobre nuestra mente, aquella que vive con nosotros, y llegaremos a concluir que, tal como la utilizamos, es un equipaje innecesario; los árboles, las plantas y toda la grandeza que podemos encontrar en la naturaleza existen sin mente individual y existen con más belleza que ningún ser humano y una vez que podamos quitárnosla, asi sea por unos pocos minutos, nuestra existencia comenzará a transformarse, entraremos en una nueva dimensión, la dimensión de la ausencia de peso. Esto es lo que los Maestros Espirituales a través de la eternidad del tiempo quisieron enseñarnos, mediante parábolas, sutras o koanes, tanto en las culturas orientales como occidentales, sin embargo, poco o nada sabemos ver y poco o nada sabemos escuchar.

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