domingo, 21 de abril de 2024

LO QUE EXISTE ADENTRO


Jesús dice: "Vayan entre la gente, coman lo que ponen ante ustedes, y sanen al enfermo de entre ellos. Porque aquello que entra por sus bocas no los hará impuros, sino aquello que sale de sus bocas, eso es lo que los hará impuros".

Esto es muy significativo. Así que no te preocupes demasiado de que la comida no sea pura. El asunto no es qué es lo que llevas hacia adentro, el asunto es lo que sacas de adentro, porque eso muestra tu cualidad, lo que sacas de adentro; cómo lo transformaste, esa es la cosa.

Un loto nace en el lodo; el lodo es transformado, se convierte en un loto. El loto nunca dice: "Nunca comeré este lodo ¡está sucio!". No, ese no es el asunto. Si eres un loto nada es sucio. Si tienes la capacidad de un loto, si tienes el poder de transformación, la alquimia, entonces puedes permanecer en el lodo y un loto nacerá. Y si no tienes la cualidad de un loto, entonces aún si vives en el oro, sólo lodo saldrá de ti. Lo importante no es lo que entra en ti, lo importante es que si estás centrado en tu ser, cualquier cosa que entre es cambiada, es transformada; toma la cualidad de tu ser y sale.

Sucedió durante la vida de Buda: Accidentalmente fue envenenado; fue envenenamiento con comida, pero fue un accidente. Un hombre pobre lo invitó, y el pobre hombre había esperado muchos días para invitarlo. Así que llegó temprano, a las cuatro de la mañana, y se puso de pie cerca al árbol de Buda donde estaba durmiendo, para ser el primero en invitarlo, y fue el primero. Buda abrió sus ojos y el hombre le dijo: "¡Acepta mi invitación! He estado esperando muchos, muchos días, y por muchos años he estado preparándome. Soy un hombre pobre y no puedo gastar, pero ha sido un antiguo anhelo el que vengas y comas en mi casa". Buda dijo: "Iré".

Justo en ese momento, el rey del pueblo se acercó con su carroza, con sus ministros, con un gran séquito y le rogó a Buda: ''Ven, ¡te invito ...!".

Buda dijo: "Es difícil; mis discípulos irán a tu palacio, pero ya he aceptado una invitación y este hombre ha estado aquí en el momento en que abrí los ojos. El es el primer anfitrión, así que tendré que ir".

El rey trató de persuadirlo de que eso no era bueno: "Este hombre ¿qué puede darte de comer? Sus hijos se están muriendo de hambre, ¡no tiene comida!".

Buda dijo: "Ese no es el asunto. El me invita y yo tengo que ir". Así que Buda fue.

¿Qué había hecho ese hombre? En Bihar y en otras partes pobres de la India, la gente recoge muchas cosas en la estación de lluvia; cualquier cosa que crezca, semillas germinadas en la tierra, las recogen. Un tipo de flores, kukarmutta, algo como sombrilla blanca que brota en la estación de lluvias... Las recogen, las secan y las guardan para todo el año; ese es su único vegetal, pero a veces se vuelve venenoso.

Así que ese hombre había recogido kukarmutta para Buda. La había secado, preparado, y cuando Buda comenzó a comerla, ya se había vuelto venenosa, era muy amarga. Pero eso era el único vegetal que había preparado, y si Buda dice: "Esto está amargo y no lo puedo comer", entonces el hombre se sentirá herido porque no tiene nada más. Así que continuó comiendo, nunca mencionó que eso estaba amargo y era venenoso. Y el hombre se sintió muy feliz. Buda regresó y el veneno comenzó a tener efecto. Vino el doctor y dijo: "Es un caso muy difícil. El veneno ha entrado en la sangre y es imposible hacer nada iY Buda tendrá que morir!".

Lo primero que Buda hizo fue: reunió a sus discípulos y dijo: "Este hombre no es común, es excepcional. Porque la primera comida me fue dada por mi madre, y ésta es la última comida, él es tanto como mi madre. ¡Así que hónrenlo porque esto es algo raro!". "En miles de años se da un Buda y sólo dos personas tendrán la rara oportunidad. Primero la madre para ayudar a Buda a entrar en el mundo; y finalmente este hombre para ayudarme a entrar en el otro mundo. Así que vayan y anuncien a la gente que este hombre tendrá que ser venerado ¡él es grande!".

Los discípulos estaban muy confundidos porque estaban pensando matar a ese hombre. Cuando todos se fueron, Ananda le dijo: "Esto es pedimos demasiado, que respetemos a ese hombre. Es el asesino, ¡te ha matado! Así que no digas esto ¿por qué dices esto?".

Buda dijo: "Yo los conozco, pueden matarlo, por eso es que digo esto. Vayan hónrenlo. Esto es una oportunidad rara que sucede sólo unas cuantas veces en el mundo: darle a un Buda su última comida".

Veneno le es dado, pero amor es lo que sale. Esto es alquimia: siente compasión por este hombre que casi lo ha matado. Aún cuando le es dado veneno... de un Buda sólo brota amor.

Jesús dijo: "Porque aquello que entra por sus bocas no los hará impuros", aún el veneno no te puede hacer impuro, "sino aquello que sale de sus bocas, eso es lo que los hará impuros". Así que recuerda cómo transformas las cosas: alguien te insulta, te alimenta con un insulto, eso no va a hacerte impuro ¿Qué sale ahora de tu interior? ¿Cómo transformas el insulto? ¿Sale amor u odio?

Así que Jesús dice: "Presta atención a lo que sale de tu interior, no te preocupes mucho por lo que entra". Y esto tiene que ser recordado por ti también, de otro modo todo tu enfoque puede estar errado. Continuamente piensas en lo que entra, entonces nunca desarrollas la capacidad del ser que puede transformar las cosas. Entonces toda la cosa se vuelve externa: comida pura, este tipo de comida y ese tipo de comida; que nadie te deba tocar, eres un brahmin, un alma pura. ¡Entonces todo el asunto se vuelve una tontera! Lo real no es lo que entra, lo real es recordar que tú tienes que transformarlo.

Le sucedió a Shankara: estaba en Benares, fue una mañana a tomar su baño acostumbrado en el Ganges, pensando -el antiguo tipo de mente brahmin- que el Ganges te puede hacer puro. Cuando estaba regresando después de haber tomado su baño, un intocable, un shudra, lo tocó. Se puso muy furioso y dijo: "¿Qué has hecho? Tendré que ir de nuevo y tomar otro baño. ¡Me has ensuciado!".

Se dice que el shudra dijo: "Entonces tu Ganges no tiene valor. Porque el Ganges te purifica, y en este momento, fresco, purificado, estás viniendo y te toco ¿soy más grande que tu Ganges? y te vuelves impuro".

Y el shudra dijo: "¿Qué tipo de sabio eres? Porque te he escuchado decir que en cada uno de nosotros existe la divinidad. Así que permíteme hacerte una pregunta: Si es que el toque de mi cuerpo te ha ensuciado, eso significaría que mi cuerpo puede tocar tu alma. Pero tú dices que el cuerpo es sólo una ilusión, sólo un sueño, ¿y cómo un sueño puede tocar la realidad? ¿Y cómo un sueño puede ensuciar la realidad? Aquello que no es, ¿cómo puede ensuciar a aquello que es? O si dices que no es mi cuerpo, sino mi alma la que te ha ensuciado -porque el alma puede tocar al alma- entonces no soy un Brahma, ¿no soy la divinidad de la que hablaste? Entonces dime ¿quién te ha ensuciado?".

Se dice que Shankara se inclinó reverentemente y dijo: "Hasta ahora sólo estaba pensando acerca de la divinidad, sólo era una filosofía. Ahora tú me has indicado el camino correcto, ahora nadie me puede ensuciar. Ahora entiendo: uno existe, sólo uno existe, y lo mismo está en mí y lo mismo está en ti". Después Shankara trató muchísimo de descubrir quién era ese hombre. Nunca pudo encontrarlo. Nunca pudo descubrir quién era ese hombre. Podría haber sido el mismo Dios o podría haber sido la misma fuente... pero Shankara fue transformado.

Cualquier cosa que entre no puede ensuciarte, porque cualquier cosa que entre va al cuerpo. Nada puede entrar en ti, tu pureza es absoluta. Cualquier cosa que salga de ti lleva tu cualidad, la fragancia de tu ser, ­eso muestra algo. Si cólera sale de ti, eso muestra que adentro estás enfermo; si odio sale de ti, eso muestra que adentro no eres un todo; si amor y compasión y luz salen de tu interior, eso muestra que la integración interna ha sido alcanzada.

Espero que entiendan este extraño dicho. Malentender es fácil y con personas como Jesús los malos entendidos son siempre posibles, entender bien es casi imposible, porque ellos hablan la verdad, y la verdad siempre es paradójica porque no estás listo a escuchar, no estás centrado.

Entiendes a través de la mente y la mente se entrevera, se confunde, interpreta, entonces este dicho se volverá peligroso. Debo decirte que este dicho no ha sido registrado en la versión autorizada de la Biblia. Ha sido puesto de lado ¡porque esto es peligroso! Está registrado, pero no en la versión autorizada, no en la Biblia en la que creen muchos cristianos. Pero también había otra gente que tomaba nota cuando Jesús estaba hablando; estas notas han sobrevivido, han sido encontradas hace sólo veinte años en una cueva en Egipto.

Todos estos dichos que estamos tratando pertenecen a esas notas, no son de la versión autorizada, porque la versión autorizada nunca puede estar correcta es imposible. Porque una vez que organizas una religión, el espíritu muere. Algo organizado está muerto. Y además están los intereses creados: ¿cómo podría el Papa del Vaticano decir?: 'Si ayunan engendrarán pecados para ustedes mismos' -entonces nadie ayunaría. 'Y si oran se condenarán' entonces nadie oraría. 'Y si dan limosna harán mal a sus espíritus', entonces nadie donaría. Entonces, ¿cómo esta gran organización de la iglesia...?

Los cristianos tienen la organización más grande: sólo los sacerdotes católicos son un millón doscientos mil, miles y miles de iglesias en toda la tierra. La organización más rica es el cristianismo católico; ni siquiera los gobiernos son tan ricos, porque todo gobierno está en bancarrota. Pero el Vaticano, el Papa, es el hombre más rico, con la organización más grande en todo el mundo, el único estado internacional, no tan visible, muy invisible, pero millones de gente trabajando bajo él.

¿Cómo puede suceder todo esto? Sucede a través de donaciones, y si los cristianos aprenden que Jesús dice: "No den, harán daño a sus espíritus...". Y estas iglesias han sido hechas para orar, y si la gente llega a saber que Jesús dice: 'No oren, de otro modo cometerán pecado", ¿quién irá a orar ahí? y si no hay oración, si no hay ayuno, ni ritual, ni donaciones, entonces ¿cómo puede existir el sacerdote? Jesús destruye los mismos cimientos de toda religión organizada, entonces Jesús puede estar presente, pero no puede haber cristianismo.

Esto no está registrado, debe haber sido omitido. También puedes malentender, pero si puedes sentir lo que estoy diciendo, lo entenderás. El no está contra la oración, no está contra el ayuno, no está contra dar y compartir, está contra sus caras falsas.

Lo real debe provenir de tu ser. Primero debes cambiar y ser transformado, sólo entonces, cualquier cosa que hagas será buena.

Alguien le preguntó a San Agustín: "¿Qué deberíamos hacer? No soy un hombre muy instruido, así que dímelo en breve, en tan pocas palabras como sea posible".

Agustín dijo: "Entonces sólo hay una cosa a decirse: ¡Ama! Y entonces cualquier cosa que hagas será correcta".

Pero si amas, por supuesto, todo se vuelve correcto; pero si no amas, entonces todo va mal.

Amor significa ¡ausencia de ego! Amor significa estar centrado. Amor significa ¡permanecer bienaventurado! Amor significa ¡estar agradecido! Esto es lo que significa: vive a través de tu ser, no a través de tus actos. Porque tus actos están en la superficie, el ser está en la profundidad.

Deja que las cosas salgan de tu ser. No dirijas ni controles tus acciones; transforma tu ser. Lo real no es lo que tú haces, lo real es lo que tú eres.

sábado, 13 de abril de 2024

ESTAR CENTRADO

Cada vez que la mente es una unidad, una cualidad superior se expresa y lo inferior inmediatamente se sedimenta. Es como... vas a la escuela: el director está en la escuela, entonces los profesores están trabajando bien y los alumnos están aprendiendo bien y hay orden. El director ha salido afuera, ahora los profesores son los del nivel más alto; ahora no hay tanto orden porque los profesores están en libertad. Comienza a funcionar una energía inferior: comenzarán a fumar, "irán a tomar té, comenzarán a chismear. Pero los profesores están ahí, los alumnos están bajo disciplina. Los profesores se han ido... Una clase sin profesor se vuelve un caos, es una muchedumbre, una muchedumbre demente. El profesor entra en la clase y de pronto todo cambia, una fuerza superior ha entrado, el caos desaparece.

El caos simplemente demostraba que la fuerza superior estaba ausente. Cuando no hay caos -armonía- demuestra simplemente que la fuerza superior está presente. Tu mente está en caos: un punto superior es necesario, una cristalización superior es necesaria. Ustedes son como niños de escuela, una clase, una clase demente, y el profesor no está presente. Cada vez que llegan a concentrarse, inmediatamente una función superior se hace presente.

Así que Jesús dice: "¡Sana!". La palabra sana (heal); proviene de la misma raíz que la palabra todo (whole); y "heal", "whole" y la palabra "holy" (sagrado) también provienen de una misma raíz. Sana a una persona, ésta llega a ser un todo, y cada vez que la persona llega a ser un todo se vuelve sagrada. Y este es todo el proceso. La mente está en enfermedad porque no tiene centro. ¿Tienes un centro en la mente? ¿Puedes decir: "Este centro soy yo"? Cada momento cambia: en la mañana tuviste cólera, entonces sentiste que la cólera eras tú; en la tarde te volviste amoroso, entonces pensaste:'''El amor soy yo"; por la noche te frustraste, entonces pensaste: "La frustración soy yo". ¿Existe algún centro en ti o eres simplemente una muchedumbre en movimiento?

Tal como estás no hay centro, no hay centro todavía y un hombre sin centro está enfermo. Un hombre sano es un hombre con un centro. Jesús dijo: "¡Dale centro a la gente!", entonces sea cual sea el caos a tu alrededor, el centro permanece ahí, permaneces centrado veinticuatro horas, algo permanece continuo. Aquello continuo llegará a ser tu ser.

Míralo de esta manera: hay tres capas de existencia. Una capa es de objetos, el mundo objetivo; a todo tu alrededor tus sentidos te lo reportan, tus ojos lo ven, tus oídos lo escuchan, tus manos lo tocan. El mundo objetivo es la primera capa de la existencia; si te pierdes en ello te mantienes contento con lo más superficial. Una segunda capa existe dentro de ti, la capa de la mente: pensamientos, emociones, amor, cólera, sentimientos, esa es la segunda capa. La primera capa es común -si tengo una piedra en la mano la podrás ver- es una objetividad común.

Cuando me ves, nunca me ves, sólo ves mi cuerpo; cuando te veo, nunca te veo, sólo veo tu cuerpo. Nadie puede ver lo que está dentro de tu mente. Uno puede ver tu comportamiento: cómo haces lo que haces, cómo reaccionas. Uno puede ver la cólera en tu cara, tu cara enrojecida, la crueldad que te sobrecoge, la violencia en tus ojos; pero uno no puede ver la cólera dentro de tu mente. Uno puede ver los gestos amorosos que haces con el cuerpo, pero uno no puede ver el amor. Y puedes estar haciendo sólo un gesto y puede no haber amor. Puedes engañar con los actos; has estado haciendo eso. ­

Tu cuerpo puede ser conocido por todos los demás, pero no tu mente. El mundo objetivo es común a todos, ese es el mundo de la ciencia. La ciencia dice que es la única realidad, porque la ciencia dice: "No podemos conocer tus pensamientos, ya sea que existan o no, nadie lo sabe. Sólo tú lo puedes decir, pero tu pensamiento no es común a todos, no es objetivo; no podemos experimentar con tus pensamientos, no los podemos ver. Tú los reportas; puedes estar engañando o puedes ser engañado ¿quién sabe?". Tus pensamientos no son cosas, pero sabes bien que existen. No sólo existen cosas, existen pensamientos. Pero los pensamientos son personales, privados, no son comunes a todos.

La capa exterior, la primera capa: la realidad de la superficie crea la ciencia. La segunda capa: de pensamientos, de sentimientos, crea la filosofía, la poesía. ¿Pero es eso todo? ¿Materia y mente? Si eso es todo, entonces jamás podrás estar centrado, porque la mente siempre es un flujo. No hay centro, ayer tuviste unos pensamientos, hoy día tienes otros pensamientos, mañana tendrás otros pensamientos, es como un río, no tiene centro. ­

En la mente no puedes encontrar ningún centro: los pensamientos cambian, los sentimientos cambian, son un flujo. Entonces siempre permanecerás enfermo, tranquilamente enfermo, nunca podrás ver un todo. Pero también hay otra capa, la más profunda. Primero es el mundo objetivo, la ciencia y su mundo; segundo es el mundo de los pensamientos, de la filosofía y poesía, de los sentimientos, pensamientos y después hay un tercer mundo que es el de la religiosidad, y ese es el mundo del ser, desde donde se presencia, desde donde se mira los pensamientos, desde donde se mira las cosas.

Ese es uno, no hay dos. Ya sea que mires una casa o que cierres tus ojos y mires a la figura de la casa, adentro, el que presencia es el mismo. Ya sea que observes la cólera o que observes el amor, el que presencia sigue siendo el mismo. Ya sea que estés triste o contento, ya sea que la vida se haya vuelto poesía o que se haya vuelto pesadilla, no hay diferencia, el que presencia es el mismo, el testigo permanece siendo el mismo. Sólo el ser, el testigo, es el centro; este testigo es del mundo de la religiosidad.

domingo, 7 de abril de 2024

LA MENTE DIVIDIDA


Jesús dice: "...y si dan limosna harán mal a sus espíritus", porque darán por motivos errados. Puedes hacer una buena acción por motivos errados y entonces yerras totalmente. Y si van a cualquier tierra y caminan por las regiones, y si los reciben, coman lo que ponen ante ustedes, y sanen al enfermo de entre ellos".

Dos cosas les dice Jesús a sus discípulos, que: "Cualquier cosa que les den recíbanla, no pongan condiciones".

Los monjes jainas no pudieron salir del país. El budismo se extendió tanto, casi la mitad del mundo se volvió budista, pero los jainas permanecieron confinados a este país, no más de tres millones.

Mahavira y Buda... del mismo calibre, pero ¿por qué los jainas no pudieron enviar sus mensajes hacia el exterior? A causa del monje jaina; él no irá, pone condiciones: un tipo particular de comida, preparada en una manera especial, que debe ser dada a él de una manera muy especial. ¿Cómo podría salir del país? Aún en la India él puede ir sólo a aquellos pueblos donde ya viven jainas, porque ellos no aceptarán comida de nadie más. Por esta adicción a la comida Mahavira se volvió inútil para el mundo. El mundo no pudo usar a un gran hombre.

Jesús les dijo a sus discípulos: "Vayan por cualquier tierra y caminen por las regiones; y si los reciben coman lo que ponen ante ustedes no pongas ninguna condición, que 'comeré sólo esto"'.

Tu paso por el mundo deberá ser incondicional. Si pones condiciones te volverás una carga. Por eso es que los discípulos de Jesús nunca se han convertido en una carga: ellos comían cualquier cosa que se les diera, usaban cualquier ropa que pudieran conseguir, vivían en todo tipo de climas con todo tipo de gente, se mezclaban con todos. Por eso es que el cristianismo pudo extenderse como el fuego: es por la actitud del discípulo, no pone condiciones.

Y sólo una cosa dice Jesús: "Y sanen al enfermo de entre ellos".

El no dice: "Enséñale lo que es la verdad". ¡No! ¡Eso es inútil! El no dice: "Fuérzalos a creer en mi mensaje" ¡eso es inútil! "Simplemente ¡sana al enfermo! Porque si una persona está enferma, ¿cómo puede llegar a entender la verdad? ¿Cómo puede llegar a entenderla? Cuando su espíritu está enfermo ¿cómo puede recibir mi mensaje? ¡Sana al enfermo! Hazlo un todo integrado, eso es todo". Cuando él sea un todo y esté sano será capaz de entender la verdad, será capaz de entender a Jesús.

"Sean servidores, terapeutas, sólo ayuden a la gente a curarse". Psicológicamente todo el mundo está enfermo. Fisiológicamente, puede ser que no todos estén enfermos; todo el mundo está enfermo en lo que respecta a la mente, y una profunda curación es necesaria en la mente. Jesús dice: "Sean terapeutas, vayan y sanen sus mentes".

Trata de entender cuál es el problema con la mente: dividida está enferma, no dividida está sana. Si hay muchas cosas contradictorias en la mente, está enferma, es como una muchedumbre, como una muchedumbre demente. Pero si sólo hay una cosa en la mente, está sana porque a través de la unidad ocurre la cristalización. A menos que la mente sea llevada a la unidad, permanecerá enferma.

Hay ciertos momentos cuando tu mente también llega a ser una unidad. Ciertos momentos a veces ocurren accidentalmente: una mañana te levantas, es temprano, todo está fresco y el sol está saliendo, simplemente todo está tan bello que te llegas a concentrar. Te olvidas del mercado adonde tenías que ir, te olvidas de la oficina adonde tenías que ir, te olvidas de que eres un hindú, un mahometano o un cristiano, te olvidas de que eres un padre o una madre o un hijo, te olvidas de este mundo. El sol es tan hermoso y la mañana está tan fresca, te absorbes en ella, te vuelves uno.

Por un solo momento, cuando eres uno, la mente es una unidad y está sana, sientes una bienaventuranza surgiendo por todo tu ser. Puede suceder accidentalmente o tú lo puedes hacer ocurrir también conscientemente.

sábado, 30 de marzo de 2024

ORAR Y AMAR

 

Si ayunan engendrarán pecados para ustedes mismos; y si oran se condenarán..."

¿Qué es orar? Comúnmente pensamos que orar es pedir algo, exigir, quejarse; tienes deseos y Dios puede ayudarte a satisfacerlos. Puedes ir a la puerta de Dios y pedirle algo, vas como un mendigo. Orar es mendigar para ti, y orar nunca puede ser mendigar; orar sólo puede ser un agradecimiento, una gratitud. Pero estas actitudes son totalmente diferentes: cuando vas a orar, tu oración no es el fin en sí, es sólo un medio, y la oración no tiene significado estás orando para conseguir algo; ese algo es significativo, no la oración. Y muchas veces vas y tu deseo no es satisfecho. Entonces dejarás de orar, dirás: "¡Inútil!" eso es un medio.

Y la oración nunca puede ser un medio, así como el amor nunca puede ser un medio. El amor es el fin: amas no por alguna otra cosa; el amor en sí mismo tiene un valor intrínseco ¡simplemente amas! ¡Es tan bienaventurado! No hay nada más allá, no se busca ningún resultado a través de él. No es un medio hacia algún fin, ¡es el fin! Orar es amar, simplemente vas y disfrutas; sin pedir, sin mendigar.

La oración en sí misma, intrínsecamente, es tan hermosa, te sientes en tal éxtasis y feliz que simplemente vas y das gracias a lo divino que te permitió ser, que te permitió respirar, que te permitió ver ¡qué colores! Te permitió escuchar, te permitió estar consciente. No lo has ganado, esto es un regalo. Yendo al templo sólo para dar gracias, un profundo agradecimiento: "Cualquier cosa que me hayas dado es demasiado. ¡Nunca lo merecí!". ¿Te mereces algo? ¿Crees que en alguna forma lo mereces? Si no estuviera aquí ¿podrías decir que se te ha hecho alguna injusticia? ¡No! Todo lo que has recibido es puro regalo, es por el amor divino, tú no lo mereces.

Dios te inunda con su amor. Cuando entiendas esto, nacerá una cualidad en ti: la cualidad de ser agradecido. Entonces simplemente vas a darle tus gracias, entonces simplemente sientes gratitud. Gratitud es oración, y es tan bello sentir gratitud, que nada se le puede comparar, no hay nada en comparación. La oración es el clímax, de tu felicidad, no puede convertirse en un medio para algún otro fin.

Jesús dice: “...y si oran se condenarán...”, porque tu oración estará errada. Jesús sabe bien que cada vez que vas al templo vas a mendigar, a pedir algo. Será un medio, y si haces de la oración un medio, es pecado.

¿Qué es tu amor? Porque por medio del amor entenderás lo que sucede con la oración. Amas a una persona ¿realmente? ¿Amas, o existe alguna otra cosa ahí? ¿Una gratificación mutua? Cuando amas a una persona ¿realmente amas a la persona? ¿Le entregas tu corazón? ¿O es que simplemente explotas al otro en nombre del amor?

Usas al otro en nombre del amor. Puede ser para algún otro uso, pero usas al otro. Y si el otro dice: "¡No, no me uses!". ¿Tu amor continuará o desaparecerá? Entonces dirás: "¿De qué sirve?". Si el otro aprecia, si una hermosa mujer te aprecia, tu ego es satisfecho. Una hermosa mujer te mira y sientes por primera vez que eres un hombre. Pero si ella no te aprecia, no te mira, el amor desaparece. Un hombre hermoso, un hombre fuerte, te mira como a una mujer bella, te aprecia continuamente, te sientes gratificada, porque tu ego es satisfecho.

Esto es explotación mutua, tú lo llamas amor. Y si se crea un infierno, no hay duda; tiene que crearse un infierno porque amor es sólo el nombre, y bajo el nombre está escondida otra cosa. El amor nunca puede crear un infierno, el amor es la misma cualidad del cielo. Si amas estás feliz; tu felicidad mostrará que estás enamorado.

Pero mira a los amantes: no parecen estar felices, sólo al principio, cuando sólo están planeando, sin saberlo, inconscientemente, tirar las redes para cogerse mutuamente. Sus poesías y sus romances y toda su tontera es sólo para cogerse mutuamente. Una vez que se coge al pez, entonces están infelices, entonces se sienten aprisionados. El ego de cada uno se vuelve la prisión para el otro, y ambos tratan de dominar y poseer.

Este amor se vuelve una condena. Si tu amor está errado tu oración no puede ser correcta, porque orar quiere decir amar al todo y si has sido un fracaso en el amor con un ser humano común, ¿cómo puedes tener éxito en tu amor con lo divino?

El amor es simplemente un pasa a la oración. Tienes que aprenderlo. Si puedes amar a un ser humano, sabes el secreto. La misma llave se usará con lo divino, por supuesto más amplificado, multiplicado millones de veces. La dimensión es grande pero la clave permanece igual. Amor significa que éste es el fin, y que no hay ego en él. Cuando estás sin ego hay amor. Entonces simplemente das, sin pedir nada a cambio. Simplemente das, porque dar es tan hermoso, compartes porque compartir es tan maravilloso, entonces no hay negocio. Cuando no hay negocio ni egos el amor fluye entonces no estás congelado, entonces te disuelves. Esta disolución tiene que aprenderse, sólo entonces podrás orar.

sábado, 23 de marzo de 2024

EL AYUNO

 


Jesús dice: 'Si ayunan engendrarán pecados para ustedes mismos...”.

¿Qué es ayuno? ¿Cómo puedes ayunar? ¿Y por qué la gente ayuna? El dicho de Jesús es muy profundo, más profundo que cualquier afirmación que Mahavira haya hecho sobre el ayuno. Jesús está diciendo una verdad psicológica muy profunda, y la verdad es que la mente se va a los extremos: una persona demasiado obsesionada con la comida puede ayunar fácilmente. Esto parecerá extraño, paradójico: que una persona que come demasiado pueda ayunar fácilmente, que una persona que es demasiado obsesiva en comer pueda ayunar fácilmente, sólo este tipo de persona puede ayunar fácilmente. Una persona que siempre haya sido equilibrada en la dieta, encontrará que es casi imposible ayunar ¿por qué? Entonces tenemos que entrar en la fisiología y la psicología del ayuno.

Primero la fisiología, porque eso es la capa más externa. Si comes demasiado almacenas demasiadas reservas, almacenas demasiada grasa. Entonces podrás ayunar muy fácilmente, porque la grasa no es sino reservas, un reservorio. Las mujeres pueden ayunar más fácilmente que los hombres, y tú lo sabes. Si ves a tu alrededor gente que ayune, particularmente jainas, encontrarás que si un hombre ayuna, entonces cuatro o cinco mujeres pueden ayunar: esa es la proporción.

El esposo no puede ayunar pero la esposa sí puede ayunar. ¿Por qué? Porque el cuerpo femenino acumula más grasa, es más fácil... tienes demasiada grasa en ti; porque en el ayuno comes tu propia grasa. Por eso es que cada día perderás una o dos libras de peso. ¿A dónde va ese peso? Te estás comiendo a ti mismo, es una manera de comer carne.

Las mujeres pueden ayunar fácilmente, ellas acumulan más grasa, por eso es que sus cuerpos son más redondos y no hay mucha dificultad. La gente gorda puede ayunar muy fácilmente, ellos pueden hacer dieta, siempre están en busca de la dieta. Un hombre común y saludable puede almacenar tanta grasa que por tres meses puede ayunar sin morir; noventa días, esa cantidad de reserva puede ser almacenada. Pero si tú eres delgado y no tienes grasa, eso significa que has estado comiendo equilibradamente, sólo tanto como es necesario para la actividad diaria del cuerpo, no has almacenado mucha grasa, no puedes ayunar. Por eso es que el culto al ayuno está siempre en el ambiente de la gente rica.

En un segundo lugar, psicológicamente, debes estar obsesionado con la comida. La comida debe ser tu obsesión: debes estar comiendo demasiado, comiendo y comiendo y pensando en comer más y más. Ese tipo de mente algún día se hastía de la comida, pensando en eso. Cualquier cosa, si piensas demasiado, te hastiará. Cualquier cosa, que tengas demasiado, te hastiará. Entonces lo opuesto se vuelve atractivo: ha estado comiendo demasiado, ahora necesitas ayunar. Ayunando serás capaz de comer otra vez con gusto, el apetito regresará, esa es la única manera.

Y la mente tiene una ley básica: que puede irse al opuesto muy fácilmente, pero no puede permanecer en el medio. El balance es la cosa más difícil para la mente, los extremos son siempre fáciles. ¿Comes demasiado? tú puedes ayunar, porque ese es otro extremo; pero no puedes permanecer en el medio, no puedes permanecer en la comida correcta, en la dieta correcta. ¡No! Ya sea en este lado o en el otro la mente siempre se inclina a los extremos. Es como un péndulo de reloj: va a la derecha, después a la izquierda, luego a la derecha: Si se detiene en el medio entonces el reloj se detiene, entonces no hay posibilidad para que el reloj continúe.

Si tu mente se detiene en el medio entonces el pensar se detiene, entonces el reloj se detiene. Pero si vas al extremo: tarde o temprano, lo opuesto otra vez volverá a ser significativo, atractivo, y tendrás que ir al opuesto.

Jesús entiende bien esto, muy bien, y dice: 'Si ayunan engendrarán pecados para ustedes mismos...”.

¿Qué es pecado? En la terminología de Jesús; el extremo, ir al extremo es pecado. Permaneciendo justo en el medio, estás más allá del pecado. ¿Por qué? ¿Por qué ir a los extremos es pecado? Ir a los extremos es pecado porque en el extremo tú has escogido la mitad y la otra mitad ha sido negada y la verdad es el todo. Cuando dices: "Comeré demasiado", has escogido la mitad. Cuando dices: "No comeré en absoluto", de nuevo has escogido la mitad, has escogido algo. En el medio no hay elección: alimentas el cuerpo, no estás obsesionado ni con esto ni con aquello; no estás obsesionado en absoluto, no estás neurótico. El cuerpo obtiene lo que necesita, pero no estás demasiado cargado por su necesidad.

Este equilibrio está más allá del pecado. Así que cada vez que tengas un desequilibrio, eres un pecador. De acuerdo a la idea de Jesús, una persona que está demasiado en el mundo es un pecador, pero si va al otro extremo y renuncia al mundo, se vuelve demasiado en contra del mundo, entonces de nuevo es un pecador. Una persona que acepta el mundo sin escoger esta forma o aquella, lo trasciende.

La aceptación es trascendencia. La elección significa que tú has entrado, que tu ego ha entrado, ahora estás luchando. Y cada vez que vas a un extremo tienes que luchar continuamente, porque un extremo nunca puede estar tranquilo, sólo en el medio podrás estar tranquilo. En el extremo siempre estarás tenso, preocupado, habrá ansiedad. Sólo en el medio, cuando estás equilibrado, no hay ansiedad, no hay angustia, estás en casa; nada te preocupa porque no hay tensión. Tensión quiere decir extremo. Has tratado mucho los extremos, por eso es que estás demasiado tenso. O estás tras las mujeres, entonces el sexo continuamente entra en la mente, o te vuelves contrario, entonces también el sexo está en la mente. Si tú estás existiendo para el sexo, entonces el sexo será la única cosa en la mente, el humo. Si estás contra él, entonces de nuevo el sexo estará en la mente porque a los amigos los recuerdas, a los enemigos los recuerdas más. A veces los amigos pueden ser olvidados, pero los enemigos nunca, ellos siempre están presentes; ¿cómo puedes olvidar a tu enemigo? Así que la gente que se desenvuelve en el mundo del sexo está llena de sexo. Y mira en los monasterios, anda a los monasterios donde la gente se ha ido al otro extremo, ellos continuamente están con el sexo, todas sus mentes se vuelven sexuales.

Come demasiado; obsesiónate con la comida como si toda tu vida existiera para comer continuamente en la mente habrá comida. Entonces ayuna: entonces también continuamente habrá comida en la mente, y si algo continuamente está en la mente, se vuelve una carga. La mujer no es el problema, el hombre no es el problema -el problema es el sexo continuamente en la mente. La comida no es un problema: comes y se acabó; pero la comida continuamente en la mente, entonces eso es un problema.

Y si hay muchas cosas continuamente en la mente, entonces están disipando energía; la mente se vuelve opaca, aburrida, tan cargada que la vida parece no tener sentido. Cuando la mente está sin carga, sin peso, fresca, entonces ocurre la inteligencia, entonces miras al mundo con ojos frescos, con una consciencia fresca, descargada. Entonces toda la existencia es bella, esa belleza es Dios: Entonces toda la existencia está viva, esa vida es Dios. Entonces toda la existencia es extática, cada momento de ella, cada instante de ella es bienaventurado esa bienaventuranza y éxtasis es Dios.

Dios no es una persona esperándote por alguna parte; Dios es una revelación en este mundo. Cuando la mente está en silencio, clara, descargada, joven, fresca, virgen, con una mente virgen Dios está en todas partes. Pero tu mente está muerta, y la has matado a través de un proceso particular. Y ese proceso es ir de un extremo al otro, luego de nuevo yendo de este extremo al otro, pero sin estar nunca en el medio.

sábado, 16 de marzo de 2024

LA ORACIÓN

 

Jesús dijo a sus discípulos: 'Si ayunan engendrarán pecados para ustedes mismos...".Y siempre hemos estado escuchando que la religión enseña el ayuno, porque ha sido dicho una y otra vez que cuando ayunas eres purificado a través de eso. Toda la religión de los jainas depende del ayuno. Si ellos escucharan este dicho de Jesús dirían: "Este es un hombre peligroso, y los judíos hicieron bien; ¡lo crucificaron!".

Los judíos también fueron perturbados: tales dichos son rebeldes y toda la moralidad se perdería si le dices a la gente: 'Si ayunan engendrarán pecados para ustedes mismos: ¡el ayuno se vuelve un pecado! ". ...y si oran se condenarán”. ¿Alguna vez lo has oído? "si oras serás condenado”. Entonces ¿qué es la religión? Pensamos que la religión es ir a la iglesia y orar a Dios, y Jesús dice:"...si oran se condenarán; y si dan limosna harán mal a sus espíritus".

El más extraño de los dichos, pero muy significativo. Jesús está diciendo: que tal como estás no puedes hacer nada correcto. El énfasis no es en ayunar o no ayunar; el énfasis no es en dar limosna o no; el énfasis no es en orar o no. El énfasis es que cualquier cosa que hagas ahora, tal como eres, todo estará errado.

¿Puedes orar?, Puedes ir al templo, eso es fácil, pero no puedes orar. La oración necesita una cualidad diferente, esa cualidad tú no la tienes, así que sólo puedes engañarte que estás orando. Anda y mira en el templo a la gente que está orando: simplemente están engañando ¡ellos no tienen esa cualidad para orar! ¿Cómo puedes orar; Y si tú tienes la cualidad para orar ¿cuál es la necesidad de ir al templo o a la iglesia?

Donde sea que estés, la oración está: te mueves, caminas ¡y esto es oración! Comes, amas ¡y esto es oración! Miras, respiras ¡y esto es oración! Porque la cualidad de la oración está siempre presente, es como respirar. Entonces no puedes estar en ningún momento sin orar. Pero entonces no hay necesidad de ir al templo, a la iglesia. Las iglesias y los templos existen para aquellos que quieren engañar, para aquellos que no tienen la cualidad de la oración pero les gustaría creer que están orando.

Un hombre pecador se estaba muriendo. Nunca había estado en el templo, nunca había orado, nunca había escuchado lo que dicen los sacerdotes, pero en el momento de la muerte tuvo miedo. Le pidió al sacerdote que viniera, le rogó. Cuando el sacerdote vino había una muchedumbre. Había mucha gente alrededor, porque el pecador era un hombre de gran éxito; un político, tenía poder, tenía dinero, así que mucha gente se había congregado.

El pecador le pidió al sacerdote que se acercara porque quería decirle algo en privado. El sacerdote se le acercó y el pecador le susurró al oído: "Sé que soy un pecador y sé bien que nunca he ido a la iglesia, no he asistido a la iglesia. No soy un hombre religioso en absoluto, nunca he orado, así que sé bien que el mundo no me va a perdonar. Pero ayúdeme, deme un poco de confianza y ¡dígame que Dios me va a perdonar! El mundo no me va a perdonar, eso lo sé, y nada se puede hacer ahora sobre eso, pero dígame una cosa: ¡Que Dios me va a perdonar!".

"Bien", dijo el ministro, el sacerdote, "tal vez Dios te perdone, porque él no llegó a conocerte de la manera que ahora te conocemos. Tal vez él lo haga, porque no te conoce en la forma como nosotros te conocemos". Pero si no puedes engañar al mundo ¿podrás engañar a Dios? Si no puedes engañar a las mentes comunes ¿podrás engañar a la mente divina? Es tan solo un consuelo, algo cómodo: "Tal vez". Pero ese "tal vez" es absolutamente errado; ¡no te aferres a los "tal vez".

La oración es una cualidad que pertenece a la esencia y no a la personalidad. La personalidad es aquello que has estado haciendo, es una relación con otros. La esencia es aquello que te ha venido no tiene nada que ver con tu hacer, es un regalo de Dios. La oración pertenece a la esencia: es una cualidad, no es algo que tú puedas hacer.

viernes, 8 de marzo de 2024

EL SER Y EL HACER

 

En el Quinto Versículo Jesús les dijo:

Si ayunan engendrarán pecados para ustedes mismos; y si oran se condenarán; y si dan limosna harán mal a sus espíritus.

Y si van a cualquier tierra y caminan por las regiones y si los reciben, coman lo que ponen ante ustedes y sanen al enfermo de entre ellos.

Porque aquello que entra por sus bocas no los hará impuros, sino aquello que sale de sus bocas, eso es lo que los hará impuros.”

Este es un versículo muy extraño, pero también muy significativo. Parece extraño porque el hombre no es real, porque vive en falsedad. Así que cualquier cosa que vaya él hacer será falsa.

Si oras, orarás por motivos errados; si ayunas, ayunarás por motivos errados, porque tú estás errado. Así que el asunto no es qué es correcto hacer. El asunto es cómo estar correcto en tu ser. Si tú ser está correcto, entonces cualquier cosa que hagas estará automáticamente correcta; pero si tu ser no está correcto, no está centrado, no es auténtico, entonces cualquier cosa que hagas, va a estar errada.

Finalmente todo depende no en lo que haces, sino en quién eres; Si un ladrón va a orar, su oración va a estar errada, porque ¿cómo de un corazón que ha estado engañando a todo el mundo, robando, mintiendo, haciendo daño, va a surgir la oración? ¿Cómo del corazón de un ladrón va a ser posible la oración? Es imposible. La oración puede cambiarte, ¿pero de dónde vendrá la oración? Vendrá de ti. Si estás enfermo, tu oración estará enferma.

Una vez Mulla Nasruddin llenó una solicitud de empleo. En la solicitud mencionó muchos calificativos. Dijo: "Fui el primero de mi universidad. Me ofrecieron la vicepresidencia de un banco nacional, la rechacé porque no estoy interesado en el dinero, porque soy honesto, soy un hombre verdadero. No tengo ambición, así que no me importa el salario; cualquier cosa que me den estará bien. Y amo el trabajo, sesenta y cinco horas por semana".

Cuando el superintendente que estaba haciendo la entrevista miró la solicitud, se sorprendió y dijo: "¡Dios mío! ¿No tiene usted alguna debilidad?". Nasruddin dijo: "Sólo una: ¡Soy un mentiroso!". Pero esa cubre todo. No hay necesidad de tener ninguna otra debilidad, con una es suficiente. No hay muchas debilidades en ti, tienes sólo una debilidad de esa única nacen todas. Y tienes que recordar tu debilidad, porque ella te va a seguir donde sea que vayas como una sombra; cualquier cosa que hagas, va a ser teñida.

Así que el asunto básico en la religión no es qué hacer, el asunto básico en la religión es qué ser. "El ser" significa tu centro más interno, "hacer" significa tus actividades superficiales en la circunferencia.

"Hacer" significa tu relación con otros, con el mundo externo, y "ser" quiere decir tú tal como eres, sin relaciones, tal como eres internamente.

Puedes ser, sin hacer nada, pero no puedes ser sin el ser. El hacer es secundario, prescindible. Un hombre puede permanecer inactivo, sin hacer nada, pero un hombre no puede estar sin ser, así que el ser es la esencia. Jesús, Krishna, Buda, todos ellos hablan acerca del ser. Y los templos, iglesias, mezquitas, organizaciones, sectas, los llamados gurús, profesores y sacerdotes, todos ellos hablan de hacer. Si le preguntas a Jesús, hablará acerca de tu ser y de cómo transformarlo. Si le preguntas al Papa del Vaticano, hablará sobre qué cosa hacer, sobre la moralidad. La moralidad tiene que ver con hacer, la religión con ser.

Esta distinción tiene que mantenerse tan clara como sea posible, porque todo lo demás depende de esto. Cada vez que nace una persona como Jesús, lo malentendemos. El malentendido es porque erramos en esta distinción; él habla acerca del ser, y lo escuchamos e interpretamos como si estuviera hablando sobre el hacer.

Si entiendes esto; entonces el versículo te será muy claro, muy útil. Puede convertirse en una luz en tu camino. De otro modo, es muy extraño y contradictorio y parecerá antirreligioso. Así debió haberle parecido a los sacerdotes cuando Jesús dijo que sus dichos son antirreligiosos, por eso es que lo crucificaron. Pensaron que era un hombre que iba a destruir la religión.

sábado, 2 de marzo de 2024

FLUYE CON LA VIDA

Escuché que un científico estaba trabajando para encontrar el secreto de los diamantes. Trabajó intensamente y casi todas las claves le fueron reveladas, excepto un punto. Si llega a conocer ese único punto, llegará a ser el hombre más rico del mundo. Pero trabajó intensamente y no pudo encontrar ese único punto. Entonces alguien le sugirió: "Estás desperdiciando tu vida y tu tiempo. He escuchado que hay una mujer en el Tíbet, una mujer muy sabia, y ella conoce todas las respuestas. Anda donde ella y simplemente pregúntale sobre tu problema, y ella te dará la respuesta. ¿Para qué perder tiempo aquí?".

El hombre viajó al Tíbet; le tomó muchos años. Fue muy difícil llegar donde la mujer sabia, pasando por muchas aventuras, estando su vida muchas veces en peligro, pero él llegó. En la mañana tocó la puerta. La mujer sabia abrió la puerta, era una mujer muy bella... como nunca había visto. Y no sólo era bella, sino que su mismo ser era una invitación, un ser con una gran invitación en los ojos el brillo de "¡Pasa adelante!".

La mujer dijo: "Muy bien, así que has llegado. Mi esposo ha salido y ésta es la regla: puedes hacer sólo una pregunta y la responderé. Solamente una pregunta, recuérdalo, no hay segunda pregunta". Súbitamente y sin darse cuenta, el científico preguntó: "¿A qué hora regresará tu esposo?".

Esta es la única pregunta que él había venido a preguntar. En algún lugar profundamente en el subconsciente el sexo debe de haber sido un problema, un problema real. Trabajando con diamantes, encontrando el secreto de los diamantes, debe haber sido una distracción. Profundamente en el inconsciente debe haber estado pensando: "Cuando sea el hombre más rico en el mundo todas las mujeres, todas las mujeres bellas serán mías", en algún lugar, puede no estar consciente de eso.

Puedes continuar trabajando en la superficie sin estar consciente del subconsciente, pero en el momento preciso saldrá, explotará. El escape es inútil. Sólo la transformación puede ser de ayuda, y la transformación necesita de una aceptación profunda de tu ser tal como es. Sin juzgarlo, sin decir: "Esto es bueno, esto es malo", sin evaluación. ¡No seas un juez! Simplemente confía en tu naturaleza y fluye con ella, y no trates de nadar contra la corriente.

Fluye con la vida con una confianza profunda, adonde te lleve.

No crees tu propia meta; si creas tu propia meta, te volverás falso. La vida no tiene meta. Si tú tienes una meta estás contra la vida. La vida se desenvuelve no como un negocio, se desenvuelve como una poesía, la vida fluye no desde la cabeza, fluye desde el corazón, es romance. La confianza es necesaria, la duda no ayudará. La vida no es científica, es irracional.

La vida no cree en Aristóteles y todos los lógicos, cree en el amor, en los poetas, cree en los místicos. Es un misterio a vivirse, no es un acertijo a ser resuelto,no es un rompecabezas, no es un problema. El secreto está abierto, sólo que tú estás cerrado. Es revelado en todas partes; en cada árbol, en cada hoja, en cada rayo de sol es revelado. Tú estás cerrado.

¿Por qué estás cerrado? No aceptas la vida dentro de ti, ¿cómo puedes aceptar la vida de afuera? ¡Acéptala! Comienza desde el centro de tu ser. Acéptate a ti mismo tal como eres, entonces aceptarás todo como es. Y con la aceptación viene la transformación; nunca serás el mismo que fuiste una vez que aceptes.

La transformación sucede por sí misma, viene por sí misma, pero viene siempre al dejarse fluir. Esto es lo que Jesús dice: "Desnúdate para que puedas dejarte fluir". Deja todo lo que la sociedad te ha dado eso es el significado de "ropa". La sociedad no te ha dado la vida, te ha dado sólo la "ropa". La sociedad no te ha dado el ser, te ha dado sólo el ego. Abandona la ropa y el ego desaparece. Imagínate a ti mismo caminando en las calles desnudo.

Un hombre llamado Ebrahim fue donde su Maestro -Ebrahim había sido un rey, y entonces comenzó la búsqueda- fue donde su Maestro y el Maestro dijo: "Estás listo para aceptar todo?".

Ebrahim dijo: "He venido para eso, tú dilo y yo lo haré".

El Maestro lo miró y dijo: "Muy bien, ¡quítate la ropa!".

Los discípulos se pusieron inquietos, porque Ebrahim era un gran rey y esto era demasiado e innecesario, y nunca se les había pedido a ellos, así que ¿por qué algo tan duro para el rey? Aun un discípulo le susurró al oído: "¡Esto es demasiado, no seas tan duro ¡y nunca nos lo pediste!".

Y el Maestro dijo: "Y toma tus zapatos en la mano y anda a la calle y ¡golpea tu cabeza con tus zapatos! ¡Desnudo ve por todo el pueblo!".

Y Ebrahim lo hizo. Desnudo fue alrededor de la capital golpeando su cabeza con sus zapatos. Y se dice que cuando regresó se había iluminado.

¿Qué sucedió? y él era un hombre de mucho potencial, por eso es que el Maestro exigió tanto. Un Maestro exige sólo tanto como es posible para ti. Cuanto más potencial, exigirá más; si tan solo eres un pobre, el no te exigirá nada. Ebrahim era un hombre con potencial él mismo llegó a ser un gran Maestro por derecho propio. ¿Qué sucedió? Esto sucedió, Jesús está diciendo a sus discípulos: abandonen la ropa, todo lo que la sociedad te ha dado, abandonen el ego.

Muchas veces el ego cae por sí mismo, porque es una carga, pero tú de nuevo lo pones en tu cabeza y continúas. Muchas veces eres un fracaso, muchas veces no tienes éxito. Muchas veces el ego cae por sí mismo, pero tú de nuevo... golpeado, frustrado, vencido, hecho un fracaso, pero llevarás la carga con alguna esperanza.

Aquí alguna historia que escuché: Un día el león vino donde el tigre y le dijo: "¿Quién es el amo de este bosque?".

El tigre dijo: "Por supuesto amo, tú lo eres, ¡tú eres el rey!".

Entonces el león fue donde el oso, lo detuvo y le preguntó: "¿Quién es el amo? ¿Quién es el jefe?".

El oso dijo: "Por supuesto, no hay necesidad de preguntar tú eres el rey de todos los animales, ¡tú eres el jefe!".

Entonces el león fue donde el elefante y le hizo la misma pregunta: "¿Quién es el jefe aquí?".

El elefante cogió al león, y lo tiró por los aires, por lo menos cincuenta pies. Se golpeó contra una roca; sangrando, golpeado, débil, se paró y dijo: "Si no sabes la respuesta correcta ¡ésta no es la forma de comportarse!".

Así es como has estado haciendo. Pero no lo vas a dejar, también vas a decir: "Si no sabes la respuesta correcta ¡ésta no es manera de comportarse! ¿Por qué ser tan duro? Simplemente puedes decir: No sé la respuesta.

Si puedes darte cuenta que en el fracaso cae todo lo que la sociedad te ha dado, el fracaso puede convertirse en el comienzo del éxito más grande que sea posible en la vida. Por eso es que sólo en el fracaso un hombre se vuelve religioso si él puede darse cuenta del fracaso.

Es muy difícil volverse religioso cuando tienes éxito. Entonces las ropas te están dando demasiado, ¿para qué preocuparse de estar desnudo? Entonces la ropa es una buena inversión. Pero en el fracaso, repentinamente te vuelves consciente de la desnudez que hay. Nada la puede esconder, sólo puedes engañar.

¡Usa tus fracasos! Y cuando seas aventado contra una roca, golpeado y sangrando, no repitas esta estupidez del león. Date cuenta de que no hay éxito en este mundo, no puede haber, porque todo el asunto es tan falso y con rostros falsos ¿Cómo puedes tener éxito? Aun tus Napoleones, tus Alejandros, tus Genghis Khans, todos son fracasos.

Un Jesús triunfa porque él se afirma en su originalidad, se afirma en su naturaleza. Trata de entender esto; y no sólo con el entendimiento sino abandonando poco a poco tus ropas, desnúdate; serás puro. Entonces has tirado esa manzana que comieron Adán y Eva; entonces la puerta del paraíso está abierta otra vez.

Los cristianos dicen que con Adán y Eva la humanidad fue expulsada del paraíso; con Jesús las puertas están abiertas otra vez, puedes entrar. Pero tan solo siendo cristianos no sucederá. Tendrás que reconocer a Jesús, y ese reconocimiento viene sólo cuando te has reconocido a ti mismo como un Jesús, ninguna otra cosa podrá lograrlo.

sábado, 24 de febrero de 2024

ACÉPTATE A TÍ MISMO

Jesús dice:

"...y tomen la ropa y la pongan bajo sus pies como los pequeños niños y la pisen -entonces podrán tomar al hijo del ser viviente, y no temerán".

Primero, deberías aceptar tu desnudez tal como eres ante Dios, tal como un pequeño niño ante su padre y su madre, sin vergüenza. Deberías estar ante lo divino sin vergüenza, entonces tú serás real. Si hay vergüenza, entonces las máscaras serán usadas, tendrán que ser usadas. Y lo segundo, si el sentimiento de estar avergonzado desaparece, no tendrás miedo. Ambos van juntos, si sientes vergüenza, tendrás miedo; si no sientes vergüenza, no tendrás miedo en absoluto. El miedo desaparece junto con la vergüenza. Y cuando el miedo y la vergüenza desaparecen, tus ojos están abiertos, y entonces verás al hijo de Dios, o "al hijo del ser viviente"; entonces Jesús te será revelado, entonces podrás conocer a Buda.

La gente viene y me pregunta: "¿Cómo podemos reconocer si un Maestro es iluminado o no?". Tú no puedes reconocerlo tal como estás. Es como un ciego preguntando cómo puede reconocer si la luz está encendida o apagada ¿Cómo puede reconocer un ciego? Para reconocer necesitas ojos, y los ojos del ciego están cerrados. Tú no puedes reconocer si un hombre se ha realizado o no, si es iluminado o no, si realmente es un Cristo o no, tú no puedes reconocerlo. De otro modo, ¿cómo es que Jesús fue crucificado si la gente podía reconocerlo?

Lo trataron muy mal, lo hicieron parecer tonto, lo forzaron a parecer tonto. El día que estaba llevando su cruz al Gólgota, los soldados, los palomillas, la masa, la muchedumbre a su alrededor tirando piedras, cosas sucias, divirtiéndose de que éste es el "rey de Israel", de que éste es el "hijo de Dios", el hijo del carpintero ¡se ha vuelto loco! Mofándose, le pusieron una corona de espinas en su cabeza y dijeron: "¡Mira! Aquí está el 'rey de Israel', ¡aquí está el 'hijo de Dios'!".

Y cuando ya había sido crucificado, la mofa final fue que pusieron a dos ladrones en ambos lados. El fue crucificado como un criminal con dos ladrones. Y no sólo la muchedumbre, sino también esos ladrones se mofaron de Jesús. Uno de los ladrones le dijo: "Ahora todos nosotros vamos a ser crucificados, recuérdanos, no nos olvides en tu 'reino de Dios'. Nosotros también estamos siendo crucificados contigo, así que recuérdanos porque ¡tú eres 'el hijo'! Así que, cuando alcancemos el reino de Dios, haz algo por nosotros. Y tú lo puedes hacer ¡tú puedes hacer cualquier cosa!". Ellos también estaban mofándose, a Jesús se le hizo aparecer como a un tonto.

¿Cómo fallamos en reconocerlo? Tenemos los ojos cerrados. Y los ojos están cerrados por tu ropa, no sólo por tu ropa, sino por muchos tipos de ropa, vergüenza, miedo, odio a sí mismo, condena, culpa, capas sobre capas de ropa.

Jesús dice: "A menos que se quiten la ropa sin estar avergonzados, y tomen la ropa y la pongan bajo sus pies como los pequeños niños...".

Cuando al principio a un niño se le fuerza a ponerse ropa por primera vez, él se rebela. Está en contra, porque limita su libertad y le da una falsedad. Su resistencia es natural, pero tú lo puedes forzar, lo puedes persuadir. Le dices: "Cuando salgamos tienes que ponerte estas ropas, cuando regresemos no las necesitas; porque en la sociedad la ropa es necesaria, de otro modo no podrás venir con nosotros". Y él quiere ir, tiene que ponerse las ropas. Pero en el momento que regresa esto es lo que hará: se sacará la ropa; no sólo la pondrá a un lado, saltará encima de ella. La ropa es la enemiga, lo hace falso. El no es más él mismo cuando la ropa está allí. Ahora él está libre otra vez. Celebrará su desnudez tirando las ropas y poniéndolas bajo sus pies, pisoteándolas y celebrando la desnudez. Si tú lo haces como los niños "...entonces podrán tomar al hijo del ser viviente, y no temerán".

En tu desnudez no hay miedo, porque el miedo es algo que se te ha agregado, el miedo es creado por medio de la vergüenza. Muchas religiones han estado creando culpa, que eres culpable: siéntete avergonzado y entonces llegas a tener miedo. Entonces nace una neurosis; entonces vas donde las mismas personas que han estado creando culpa y miedo en ti, vas donde las mismas personas a aprender cómo trascenderlos. Ellos no te pueden ayudar, ellos son los creadores del miedo. Ellos dirán: "Ruégale a Dios y ten temor de Dios". Ellos no pueden conducirte más allá del miedo. Jesús puede conducirte más allá del miedo, pero entonces todo el asunto tiene que ser demolido desde su misma base. Esta es la base: no te aceptes a ti mismo y siempre tendrás miedo.

Acéptate a ti mismo y no habrá miedo, no pienses en términos de "debería" y "no debería", y nunca tendrás miedo. Sé real y confía en la realidad, no luches contra la realidad. Si la cólera está presente, está ahí; acéptala. No trates de crear lo opuesto: "Estoy con cólera, esto no es bueno; no debo estar con cólera, debo perdonar. No crees el extremo opuesto, porque si creas el extremo opuesto estás tratando de crear máscaras. La cólera permanecerá, tu perdón será sólo una cara falsa y en tu cara habrá una máscara. Esto no va a ayudar.

sábado, 17 de febrero de 2024

LA MENTE ENGAÑADORA

En el cristianismo la vergüenza es el pecado original. ¿Has escuchado la historia de lo que le sucedió a Adán y Eva, en qué momento ocurrió el pecado? Ha sido una búsqueda continua exactamente en qué momento ocurrió el pecado. Se les prohibió comer del fruto del árbol del conocimiento, pero les entró la tentación. Es natural: cada vez que algo es prohibido, la tentación llega, así es como la mente se comporta. Pero la mente tiene también otro truco: te tienta, pero siempre responsabiliza a otro. Cada vez que hay algo prohibido la mente se interesa, se vuelve una invitación. La mente quiere conocer, meter las narices, averiguar.

Adán y Eva fueron tentados por ellos mismos, no había nadie más ahí. Pero la historia dice que el diablo, que satán los tentó. Esto es un truco de la mente para responsabilizar a otro. Y este "diablo" no es nada sino un chivo expiatorio, este "diablo" no es nada sino un truco de la mente para deshacerse de todas las responsabilidades. Eres tentado, pero el "diablo" es el tentador, así que tú no eres responsable. El te ha persuadido, él te ha seducido, así que él es el pecador no tú. Pero la tentación proviene de la prohibición, y éste fue el truco.

La historia es bella:

Dios dijo: "¡No comas del fruto de este árbol!". Si ellos hubieran confiado, entonces habrían evitado el árbol. Pero ellos no confiaban y dijeron: "¿Por qué Dios nos prohíbe este árbol? y este árbol es el árbol del conocimiento". La mente debe haberles dicho que: "Si comen se volverán como dioses porque serán conocedores, y él les está prohibiendo porque es egoísta. El les está prohibiendo porque no quiere que ustedes sean como dioses. Ustedes serán conocedores, entonces nada estará escondido para ustedes". Pero la historia dice que "el diablo" los tentó y dijo: "El les ha prohibido porque es egoísta y tiene miedo". Esta fue simplemente una circunstancia para que Adán y Eva probaran si es que confiaban o no, nada más.

Pero la mente persuadió, la mente es el "diablo". El "diablo" llegó en la forma de una serpiente -es el símbolo más antiguo de la astucia- la mente es la serpiente, la más astuta. Adán y Eva, ambos lo hicieron responsable, echaron la responsabilidad al diablo, y Adán echó la responsabilidad a Eva. El hombre siempre ha estado diciendo que la mujer es la tentadora, así que el hombre siempre ha estado condenando a las mujeres. En todas las escrituras del mundo la mujer es la tentadora, ella te lleva a la tentación, ella te seduce y ella es la causa de todos los problemas. Así que tus tal llamados santos continúan condenando a las mujeres.

Ese es el estilo de la mente: Eva dice: "El diablo"; Adán dice: "Eva"; y si tú le preguntas al "diablo", si le hallas en alguna parte, él dirá: "Dios, porque en primer lugar ¿para qué prohíbe? Eso creó todo el problema. De otro modo, el jardín del Edén era tan grande y habían millones de árboles, que por sí mismos Adán y Eva nunca se hubieran tropezado con el árbol del conocimiento. '¡Prohibido!', ellos sabían que éste era el árbol, entonces todo el jardín perdió interés, todo el interés se focalizó. ¡Es Dios!".

Pero la historia es hermosa y tiene millones de dimensiones en torno a ella; puede ser interpretada en muchas, muchas formas, esa es la belleza de una parábola. Tomaron el fruto del árbol, lo comieron, e inmediatamente tuvieron vergüenza de su desnudez. ¿Dónde ocurrió el pecado? ¿Al desobedecer a Dios? Si preguntas al Papa del Vaticano, dirá: "Al desobedecer a Dios", porque a los sacerdotes les gustaría que tú les obedezcas siempre, que nunca los desobedezcas.

Si les preguntas a los filósofos y no a los teólogos, te dirán: "Al comer el fruto del conocimiento". Porque cuando comienzas a pensar surgen los problemas. La vida es inocente sin pensar: los niños son inocentes porque no pueden pensar, los árboles se ven tan hermosos porque no pueden pensar. El hombre se ve tan feo porque su mente siempre está cargada y tensa, y preocupaciones y pensamientos y sueños y fantasías, y él siempre está cargado, toda su gracia se ha perdido. Así que si le preguntas a los filósofos existencialistas, te dirán que: es por el árbol del conocimiento.

Pero si le preguntas a los psicólogos, cuyo enfoque es el más profundo, ellos dirán: "A causa de la vergüenza". Porque cuando te sientes avergonzado has comenzado a odiarte. Cuando te sientes avergonzado te has rechazado a ti mismo, pero vino con el conocimiento. Los niños no pueden sentir vergüenza, ellos pueden ir desnudos muy fácilmente, no hay problema. Los fuerzan poco a poco a sentirse avergonzados: "¡No estén desnudos!". Cuánto más lleguen a saber, más se esconderán a sí mismos.

Jesús dice: "Cuando se quiten la ropa sin estar avergonzados...". Así que ¿qué hicieron Adán y Eva? Se pusieron hojas de higos cubriendo sus órganos sexuales, la primera ropa inventada comenzó el mundo. ¿Cómo puedes entrar de nuevo en el jardín del Edén? ¡Tira tus hojas de higos!, eso es lo que Jesús dice; él dice que éste es el camino de regreso al paraíso. Este es el camino de regreso: "Cuando se quiten la ropa sin estar avergonzados...". Porque puedes quitarte la ropa y permanecer avergonzado, entonces en lo profundo las ropas aún están ahí: te estás escondiendo, no estás abierto. Así que estar sin ropa no es desnudez; puedes estar sin ropa y no estar desnudo.

La desnudez tiene una dimensión más profunda: significa estar sin vergüenza, sin el sentimiento de estar avergonzado; significa aceptar tu cuerpo en su totalidad tal como es. Sin condena en la mente, sin división en el cuerpo, una aceptación simple, entonces es desnudez. No es que Mahavira sólo esté sin ropa, él no es miembro de un club de nudistas; él está desnudo, él está desnudo como un niño.

En un club de nudistas tú no estás desnudo. Aun tu desnudez está calculada, es una manipulación de la mente. Estás rebelándote, estás yendo contra la sociedad, porque la sociedad cree en ropa, estás tirando las ropas. Pero es una reacción, no eres inocente, inocente como un niño.

sábado, 10 de febrero de 2024

SE COMO ERES

Jesús dijo: "Desde la mañana hasta la noche y desde la noche hasta la mañana, no piensen en qué ropa van a vestir".

No pienses en las caras, en las ropas, en las falsedades. Permanece tú mismo como eres, acéptate tu mismo como eres. Difícil, muy difícil, porque si piensas en ti mismo como eres, de pronto te sentirás intranquilo.

De dónde viene esta intranquilidad, porque los profesores te han estado enseñando, y estos profesores son envenenadores de la vida. Realmente, no son profesores, son enemigos. Han estado enseñando: "Este es un animal, ese es un animal, y tú eres un hombre ¿Qué están diciendo? Están diciendo que: "Cualquier cosa que sea animal en ti ¡niégalo!". Y yo te digo: "Que el hombre no es algo contra el animal, el hombre es el animal supremo. No algo en contra, el más elevado, el mismo pico. Si niegas la animalidad, negarás la misma fuente de vida. Y entonces siempre serás falso".

No te pongas nada. No te estoy diciendo que vayas y camines desnudo en la ciudad, pero no te pongas nada encima: simplemente sé tú mismo. Cualquier cosa que la vida haya hecho de ti, acéptala, disfrútala, ¡dale la bienvenida! ¡Celébrala! Estate agradecido a lo divino porque él te ha hecho, cualquier cosa que seas. No la rechaces, cuando rechazas algo en ti, has rechazado a Dios; porque él te ha creado, él te ha creado en esta forma.

Por supuesto, él sabe más que tú. Cuando rechazas algo en ti, has rechazado al creador, estás encontrándole fallas al universo, a la misma existencia. Jesús dice que no pienses en lo que te vas a poner, simplemente fluye espontáneamente en la vida. Respóndele a la vida, pero no pongas ninguna falsedad entre tú y el flujo de la vida.

Vive momento a momento sin pensar, porque el pensar es la máscara más profunda. Vas donde una mujer y ensayas en la mente lo que le vas a decir: "Te amo", o "No hay nadie como tú". Si estás haciendo un ensayo, no estás enamorado. De otro modo no hay necesidad, porque el amor hablará por sí mismo, el amor fluirá por sí mismo; las cosas ocurrirán por sí mismas, las flores florecerán, pero por sí mismas, no es necesario un ensayo.

Cierta vez un amigo le preguntó a Mark Twain, él estaba saliendo del salón de conferencias, había dado una hermosa conferencia, el amigo le preguntó: "¿Qué tal? ¿Te gustó tu charla o no?" Mark Twain dijo: "¿Qué charla? Porque hay una que había preparado, y hay una que realmente di, y hay otra que quise dar, ¿sobre cuál charla estás preguntando?". Pero ésta es toda tu vida: preparas algo, das algo diferente y querías dar algo absolutamente distinto.

¿Por qué ocurre, tanta división? Porque no eres espontáneo. Uno que es espontáneo necesitará sólo una cosa, nada más, y eso es estar alerta, atento. Entonces responderá en base a su atención. Preparas porque estás inconsciente, no atento. Tienes miedo, tienes temor, porque ¿quién sabe qué situación habrá? "¿Seré capaz de responder o no?" ¡el miedo! Entonces te vuelves falso.

Y Jesús dice: "No pienses en qué ropa te pondrás".

Sus discípulos dijeron: "¿Cuándo nos serás revelado y cuándo te veremos?". Jesús dijo: "Cuando se quiten la ropa sin estar avergonzados, y tomen la ropa y la pongan bajo sus pies como los pequeños niños y la pisen, entonces podrán tomar al hijo del ser viviente y no temerán".

Trata de entender cada una de las palabras. Los discípulos preguntaron: "¿Cuándo nos serás revelado...?". Jesús está ahí revelándose en toda su gloria. El está presente delante de ellos. Ellos le están preguntando al mismo Jesús: "¿Cuándo nos serás revelado...?". Ellos piensan como si Jesús se estuviera escondiendo.

Una vez le preguntaron a Buda... estaba pasando a través de un bosque. Habían hojas secas en el camino, las hojas estaban cayendo, el viento estaba soplando y había mucho ruido en las hojas secas que habían caído. Y Ananda preguntó, -no había nadie más, otros discípulos se habían adelantado, algunos otros venían atrás siguiéndolos, pero en ese momento sólo Ananda estaba cerca a Buda- él preguntó: "Siempre he querido preguntar una cosa: ¿nos has revelado todo lo que tienes, o nos estás escondiendo algo?".

Buda dijo: "Mi mano es una mano abierta, un Buda no cierra el puño. Mira al bosque tal como se te revela, no hay nada escondido. Estoy tan abierto como este bosque, y un Buda no cierra el puño". Luego tomó unas cuantas hojas secas, hizo un puño y dijo: "Ahora mi puño está cerrado, no puedes ver esas hojas. La gente ambiciosa con su conocimiento -aquellos que no les gusta compartirlo- es como un puño.

Entonces Buda abrió la mano y las hojas cayeron y dijo: "Pero la mano de un Buda no es como un puño, él está abierto. He revelado todo. Y si tú sientes que algo aún permanece escondido, es a causa tuya, no mía".

Jesús está ahí, presente. Los discípulos le están preguntando: "¿Cuándo nos serás revelado?" -¡él está revelándose!- "¿y cuándo te veremos?". Ellos piensan como si Jesús estuviera escondiendo algo de sí. No, Jesús no está escondiendo. Al contrario, los discípulos no están abiertos, están cerrados; ¡sus ojos no están abiertos! Ellos están escondiéndose, no Jesús.

La verdad no está escondida, tú estás cerrado. La verdad es revelada en todas partes, a cada momento. La verdad, por su propia naturaleza, no puede ser escondida. Sólo las mentiras tratan de esconderse a sí mismas, no la verdad. Sólo las mentiras son secretas. La verdad es siempre como una mano abierta, nunca es como un puño. Pero tú estás cerrado.

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