sábado, 27 de junio de 2015

LAS EXPERIENCIAS ESPIRITUALES CON DROGAS

Las drogas son tan reales como cualquier otra cosa pero la experiencia que se crea bajo su efecto es una experiencia falsa.

Algunos, en tales condiciones, dicen: «He tenido experiencias de iluminación...».

No eran experiencias de iluminación. Quizás hayan sido experiencias de luz, pero no de iluminación, flashes; pero tú no te iluminas con esas experiencias, no te conviertes en un buda; al contrario, son desastrosas para ti. Las drogas cambian la química de tu cuerpo, igual que algunos hongos. No te cambia a ti, cambia tu cuerpo, igual que el alimento, el aire, el clima, la luna, la luna llena; todo ello cambia tu cuerpo, pero tú no cambias por ello. Todos esos cambios suceden en el cuerpo, son cambios químicos; no alquímicos, sólo químicos. ¿Qué es un cambio alquímico? Cuando tu consciencia cambia. Y la consciencia no puede ser cambiada por nada que venga de fuera.

La consciencia no puede cambiarse con el alimento, comer este alimento o aquél. La consciencia no puede cambiarse no comiendo, o ayunando. Recuerda, no hay mucha diferencia entre la gente que consume drogas y la gente que hace un largo ayuno, ¡ninguna diferencia! El cambio no está sucediendo en la consciencia. La consciencia está más allá de todas las químicas.

Si ayunas lo suficiente, naturalmente la química de tu cuerpo no puede seguir siendo la misma. Algunas cosas desaparecen de la química de tu cuerpo y otras se acumulan demasiado. La combinación de elementos químicos en tu cuerpo cambia.

Después de un mes de largo ayuno sentirás cosas hermosas, pero esas cosas hermosas se producen por el cambio químico. Cuando empieces a comer, desaparecerán. Si practicas determinadas posturas de yoga ininterrumpidamente, durante años, haciendo presión en la estructura de tu cuerpo en ciertos puntos, ciertos puntos importantes, trabajando los meridianos de tu cuerpo y ciertas articulaciones; la química de tu cuerpo cambiará. Respirar de determinada manera durante años cambiará la estructura de tu cuerpo, porque el equilibrio del oxígeno y del dióxido de carbono cambiará con tu respiración.

¿Te has dado cuenta de que cuando estás enfadado respiras de un modo diferente? ¿Por qué? Ese modo diferente de respirar libera algunos elementos químicos de tu cuerpo que te ayudan a estar enfadado. Si no respiras de un modo diferente serás incapaz de enfadarte. lnténtalo: respira de la forma budista y no podrás enfadarte, porque el modo budista no deja que los elementos químicos de tu cuerpo que hacen falta para el enfado se liberen.

¿Tienes miedo? Respiras de un modo distinto. Hacen falta elementos químicos diferentes, porque un hombre que está asustado necesita escapar rápido, tan rápido como pueda. Necesita volar, hacen falta algunos elementos químicos para que pueda huir rápido. Cuando estás inmerso en una pasión sexual la respiración cambia. Continúa respirando normalmente y no serás capaz de alcanzar el orgasmo. Para que el orgasmo se desencadene se necesita un determinado tipo de respiración.

Pero esos cambios son físicos; no van a afectar a tu consciencia. Ésta es testigo de todos los cambios. Trata de entenderlo.

Tienes hambre, te sientes hambriento: el cuerpo tiene hambre, la consciencia observa el hecho de que el cuerpo tiene hambre. La consciencia nunca tiene hambre, no puede experimentar el hambre; no tiene estómago. Sólo puede ser un testigo. La consciencia no es otra cosa que observar. Recuerda esta fórmula: la consciencia es atestiguar. ¿Tienes hambre? La consciencia refleja el hambre. Es como un espejo que dice: «El cuerpo tiene hambre». Cuando has comido y tu cuerpo está satisfecho la consciencia dice: «El cuerpo está satisfecho». La consciencia no tenía hambre ni tampoco está satisfecha. En ambos casos estaba sólo atestiguando: hambre/satisfacción, pasión sexual/satisfacción sexual, rabia/liberación de la rabia.

¡El crecimiento espiritual es el crecimiento de este observar! No tiene nada que ver con experiencias específicas. El crecimiento espiritual no es una búsqueda de experiencias insólitas. La espiritualidad no tiene nada que ver con este tipo de experiencias. De hecho decir que cualquier experiencia es "una experiencia espiritual" es absolutamente equivocado, porque no todas las experiencias son espirituales. Quien experimenta es el espíritu. El testigo es el único fenómeno espiritual.

El punto realmente espiritual es cuando no hay experiencias, y el que experimenta se queda solo, completamente solo, cuando todas las experiencias han desaparecido -el hambre, la saciedad, la liberación, el amor, el odio, el despertar de la kundalini, los chacras que se abren, flores de loto que se abren en ti, luces descendiendo sobre ti, escuchas una música celestial, sientes una espaciosidad, sientes alegría, sientes dicha-. No hay un objeto a experimentar, sino que ahí sólo se encuentra este testigo, observando silenciosamente la nada. Entonces has llegado. Esto es samadhi. Atestiguar la nada es samadhi. Esto es lo que el Buda llama nirvana, la nada, el vacío.

Las experiencias psicodélicas como tales no son espirituales. Cuando todas las experiencias se han ido y no sientes nada en absoluto, y tampoco te has quedado dormido... Durante el sueño también estas experiencias desaparecen. Durante el sueño profundo, en donde no hay sueños, todas las experiencias desaparecen, y el que experimenta también desaparece. En samadhi las experiencias se han ido pero el que experimenta está sentado en silencio observando la nada, atestiguando la nada. ¡Eso es iluminación! Las experiencias pueden ser luminosas, hermosas, pero no son iluminación.

Ésta ocurre cuando está ahí la luz pero cae sobre la nada. La luz llena la nada, no se ve ningún objeto en esa luz; eso es liberación. Ser liberado de las experiencias es liberarse del mundo. "El mundo" significa todo tipo de experiencias, lo que los chinos llaman "las diez mil experiencias"; en eso consiste el mundo.

La droga sólo desencadena un proceso. Sea cual sea el sueño que esté listo a explotar en ti, explotará, por eso ha habido informes de experiencias contradictorias.

Aldous Huxley cuenta que experimentó el cielo, y Karl Rahner dice que estuvo en el infierno. Ahora bien, Rahner está en contra de las drogas y Huxley totalmente a favor. Si estás a favor de las drogas, tu mismo prejuicio te ayudará a crear experiencias hermosas. Estarás esperando a que suceda algo bonito, tu creencia creará la magia. Si estás en contra desde el principio, sospechando, dudando, asustado, y ya sabes que vas a tener una experiencia infernal, la tendrás.

Un antiguo dicho sufí dice: el infierno está reservado para aquellos que creen en él. Y el cielo está también preservado para aquellos que creen en él. Pero todo es una invención. No hay infierno, no hay cielo; tú creas tu infierno, tú creas tu cielo. Si estás de un humor negativo y tomas drogas tendrás pesadillas.

Los consumidores de drogas más antiguos han estado en la India. La India sabe más de drogas que cualquier otro país. Durante diez mil años por lo menos, el noventa y nueve por cien de los sannyasins indios han estado tomando drogas, desde el Rig Veda hasta hoy. La India sabe mucho. Ha creado tecnologías, técnicas y metodologías sobre cómo tomar una droga. El viaje de una droga debe ser muy dirigido; necesita un guía, que cree la atmósfera, la idea. Poco a poco te va hipnotizando sobre lo que te está ocurriendo. Y bajo el efecto de las drogas la persona se vuelve muy sugestionable, absolutamente sugestionable; se pierde toda la razón. La facultad de soñar empieza a funcionar, la imaginación se desata. Ahora la imaginación puede hacer ambas cosas: crear el infierno o el cielo. Necesitas un guía. El guía poco a poco te conduce hacia el cielo, hacia experiencias celestiales. Crea un hermoso sueño, un sueño poético a tu alrededor, y tú estás en un estado sugestionable, eres simplemente una víctima.

Pero guiado o sin guiar, cualquier experiencia con drogas o con el ayuno es falsa. Se trata de una experiencia falsa.

En el samadhi se da cuando el testigo que se ha quedado solo, observando la nada. Esa es la verdadera experiencia espiritual, si quieres llamarla así, pero en realidad no es una experiencia, porque en la experiencia necesitas tres cosas: el que experimenta, lo experimentado y la experiencia. No quedan tres cosas en absoluto. Sólo hay un solo testigo, atestiguando la nada total, shunya, la vaciedad. Esa es la verdadera experiencia.

La verdadera experiencia es una "no experiencia". Y sólo cuando alcanzas una no-experiencia, puedes creer que estás viviendo algo iluminador. De otra forma las otras experiencias vienen y van, destellos de la mente, productos del sueño.

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