sábado, 19 de enero de 2013

LA RISA Y EL LLANTO UN MISTERIO

Se dice de Buda, que en millones de ocasiones la gente solía exponerle cuestiones que él no contestaba. Si la cuestión requería de una respuesta superficial, no contestaba; si alguien preguntaba, "¿Existe un Dios?", él permanecía en silencio. Y la gente es tonta. Empezaron a creer que no creía en Dios, pues sino, él hubiera contestado que sí no creían que era ignorante, que no sabía, de otra forma hubiera contestado sí o no.

Cuando planteas una pregunta del tipo, ¿Existe Dios?, no sabes qué es lo que estás preguntando. ¿Crees que es una cuestión para ser contestada? Si es así eres ingenuo. ¿Cómo se pueden contestar preguntas tan vitales? Entonces no conoces su profundidad; esto es curiosidad, no indagación.

Si el hombre que interpelaba a Buda hubiese sido un auténtico buscador, se hubiera centrado en el silencio de Buda, porque el silencio era la respuesta. En ese silencio él hubiera sentido la pregunta, en ese silencio la pregunta se hubiese asentado firmemente. Contra el fondo del silencio, se hubiera vuelto más clara. Una claridad le hubiera invadido.

Siempre que planteas una pregunta profunda, no se requiere de respuesta alguna. Todo lo que se necesita es centrarse en la cuestión. No vayas de aquí para allí, permanece en la pregunta y espera. La misma pregunta se convertirá en la repuesta. La cuestión, si la profundizas, te conducirá al mismo origen de dónde surge también la respuesta. Está en ti.

La cuestión era tan auténtica que si se hubiera dado alguna respuesta, esa respuesta hubiera sido estúpida. Sólo un tonto contestaría una pregunta así.

La vida es un misterio. Siempre que te encares a un misterio surgirá la risa, porque ¿cómo puedes contestar a un misterio?

¿Cuál es la cosa más misteriosa en ti? La risa es lo más misterioso. Ningún animal puede reír, sólo el hombre. Es la suprema gloria del hombre. Ningún animal ríe, ningún árbol ríe, sólo el hombre ríe. La risa es el elemento más misterioso en el hombre.

Aristóteles definió al hombre como el ser racional. No es una buena definición porque el raciocinio también se da en otros animales. La diferencia es sólo de grado, y no es mucha. El hombre sólo puede ser definido como el animal que ríe y llora, ninguna otra definición es válida porque ningún otro animal puede llorar ni ningún otro animal puede reír.

Esta polaridad se da únicamente en los seres humanos. Es algo misterioso, lo más misterioso en el hombre.

La ira existe por doquier, no es relevante. El sexo se da por doquier, no es relevante, no es tan misterioso. Si deseas entender el sexo, puedes entender la sexualidad animal y todo lo que es aplicable a la sexualidad animal puede aplicarse al hombre. En este sentido el hombre no es nada aparte.

La ira, la violencia, la agresión, la posesividad, los celos, todo existe y se da en estado más puro en los animales que en ti. Todo en ti está confuso. Por eso es que los psicólogos tienen que estudiar las ratas para estudiar al hombre. Son más simples, son más claras menos confusas y cualquier cosa que se concluya sobre las ratas es cierto también para ti. Todos los laboratorios psicológicos están repletos de ratas. Se han convertido en el animal más relevante para los psicólogos porque son como los humanos en muchos sentidos.

La rata es el único animal que sigue a los seres humanos dondequiera que vayan. Es universal. Si encuentras a un hombre en Siberia, alguna rata estará por las cercanías. Vaya dónde vaya, las ratas lo siguen, y su comportamiento es absolutamente humano. Comprende el comportamiento de las ratas y habrás entendido el comportamiento de la humanidad.

Pero la rata no puede reír, la rata no puede llorar. La risa y el llanto son dos aspectos de algo que se da sólo en el hombre. Si quieres comprender la risa y el llanto has de estudiar la humanidad, no hay otro modo para que puedan ser estudiados. Por eso es por lo que les denomino la cualidad más distintiva de la humanidad.

Siempre que presientas el misterio, tienes dos alternativas: o bien ríes o bien lloras. Depende de tu personalidad, de tu tipo.

1 comentario:

Ana Márquez dijo...

Practicaré la risa más a menudo, me gustaría ser más humana-divina :-) Gracias por compartir sabiduría. Un abrazo de luz.

Juntos por el despertar de la consciencia.

http://frasesdedios.blogspot.com.es/

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